August 09, 2023
Son muchos los mitos e ideas erróneas que existen en torno al mundo de la salud renal y la nutrición. Estudiar toda la información que se encuentra en internet puede ser confuso y abrumador, ¡pero estamos aquí para simplificarlo!
Analicemos los mitos más comunes para que tenga la información que necesita para crear un plan de alimentación saludable y equilibrado que funcione.
Mito 1: Hay una sola dieta para los riñones
Cada persona es única y eso incluye sus necesidades nutricionales, que dependen de algunos de los siguientes factores:
- Etapa de la enfermedad renal
- Resultados de laboratorio
- Medicamentos
- Comorbilidades, como diabetes o presión arterial alta
- Actividades relacionadas con el estilo de vida, como el ejercicio
Trabajar con su equipo de atención médica y un especialista en nutrición renal es la mejor forma de crear un plan de alimentación que sea adecuado para usted. Encuentre un especialista en nutrición renal cerca de usted.
Idear la dieta correcta para usted puede ser confuso, pero es posible que sea elegible para programas que pueden ser de utilidad.
- Si tiene Medicare y diabetes, tal vez reúna los requisitos para realizar una capacitación para el autocontrol de la diabetes.
- Si tiene Medicare y enfermedad renal con un IFGe de 15 a 59, posiblemente reúna los requisitos para terapia de nutrición médica (TNM).
Ambos servicios son ideales para crear una dieta que le ayude a retrasar el avance de la enfermedad. Llame a su proveedor de seguro para ver si reúne los requisitos para alguno de los dos programas.
Firme la solicitud para expandir el acceso a la terapia de nutrición médica.
Mito 2: Los cereales integrales, los frutos secos, las semillas y los frijoles tienen mucho fósforo
El fósforo es un mineral que forma huesos fuertes y mantiene saludables otras partes del cuerpo. Sin embargo, si los riñones no pueden eliminar el exceso de fósforo de la sangre, este puede quitar calcio de los huesos o se pueden generar depósitos de calcio peligrosos en los vasos sanguíneos, los pulmones y el corazón. Esos depósitos pueden aumentar el riesgo de ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares si no se controla el fósforo con la dieta o con medicamentos recetados.
Los cereales integrales, los frutos secos, las semillas y los frijoles contienen fósforo, pero eso no significa que deba quitarlos de su dieta. ¡El cuerpo solo absorbe el 50 % del fósforo proveniente de alimentos no procesados de origen vegetal! Absorbemos entre el 80 % y el 100 % del fósforo de alimentos ricos en proteínas como carne roja, pescado y productos lácteos o de alimentos procesados con aditivos de fósforo.
Por ejemplo:
- Media taza de cereales integrales contiene unos 200 mg de fósforo, pero el cuerpo solo absorberá la mitad, alrededor de 100 mg.
- Media taza de queso feta desmenuzado elaborado con leche entera contiene 328 mg de fósforo, de los cuales se absorben entre 262 y 328 mg.1
Aditivos de fósforo a los cuales estar atentos:
Hexametafosfato de sodio | Fosfato dicálcico |
Fosfato trisódico | Fosfato disódico |
Tripolifosfato de sodio | Fosfato monosódico |
Pirofosfato de tetrasodio | Ácido fosfórico |
Obtenga más información sobre el fósforo.
Mito 3: Las personas con enfermedad renal necesitan una dieta baja en potasio
El potasio es un mineral esencial que se encuentra en la mayoría de los alimentos y sin el cual no podemos vivir porque ayuda a que los nervios, los músculos y el corazón funcionen correctamente.
A diferencia de la creencia popular de que todos los que tienen enfermedad renal necesitan una dieta baja en potasio, las personas con enfermedad renal pueden correr el riesgo de tener muchísimo o poquísimo potasio.
- Alto contenido de potasio o hiperpotasemia: los niveles de potasio en la sangre son muy altos. Deberá consumir alimentos con menos o bajo contenido de potasio. El médico posiblemente le recete medicamentos para ayudar al cuerpo a deshacerse del potasio extra o los ajustará si ya los toma. Obtenga una lista de frutas y verduras con bajo contenido de potasio.
- Bajo contenido de potasio o hipopotasemia: los niveles de potasio en la sangre son muy bajos. Es posible que daba consumir alimentos con más o alto contenido de potasio si tiene poco potasio en sangre. El médico posiblemente le recete medicamentos para ayudarle a mantener el potasio o los ajustará si ya los toma. Obtenga una lista de alimentos con alto contenido de potasio.
La hiperpotasemia o la hipopotasemia repentinas o graves son afecciones que ponen en riesgo la vida y requieren atención médica inmediata.
Obtenga más información sobre el potasio.
Mito 4: Los pacientes con enfermedad renal tienen que limitar las frutas y verduras
Incluso las personas que tienen que limitar el potasio necesitan consumir suficientes frutas y verduras. ¿Por qué? Al igual que el fósforo, se absorbe menos potasio de los alimentos de origen vegetal que de las carnes rojas o los alimentos muy procesados. El contenido de fibra también puede mejorar la regularidad intestinal, favorecer la eliminación general del potasio y mejorar la acidosis, una afección en la cual los fluidos corporales contienen demasiada cantidad de ácidos.
El exceso de ácidos en el organismo puede causar:
- Aceleración del avance de la enfermedad renal
- Aumento de la pérdida ósea u osteoporosis
- Pérdida muscular
Obtenga más información sobre la acidosis.
Mito 5: Los sustitutos de la sal son más seguros que la sal
El cuerpo necesita el sodio para ayudar a que los nervios y músculos funcionen correctamente y controlar los niveles de fluidos y la presión arterial. Sin embargo, el exceso de sodio puede afectar negativamente a la salud, especialmente en las personas con enfermedad renal.
Puede causar:
- Presión arterial alta
- Incomodidad durante la diálisis
- Acumulación de líquido alrededor del corazón y los pulmones
Una reacción natural a estos datos podría ser optar por un sustituto de la sal, pero muchos de estos sustitutos contienen cloruro potásico. Esto podría ser perjudicial, en especial si tiene que limitar la cantidad de potasio que consume. Por suerte, no tiene que renunciar al sabor si debe mantener a raya la sal que consume.
Pruebe estos condimentos e ingredientes en lugar de la sal:
Ajo fresco | Romero |
Pimienta de Jamaica | Pimienta negra |
Cebolla fresca | Tomillo |
Albahaca | Jugo de limón |
Ajo en polvo | Salvia |
Curry en polvo | Vinagre |
Cebolla en polvo | Jengibre |
Si elige mezclas para sazonar bajas en sodio o sin sal, lea la etiqueta y opte por una sin cloruro potásico. Consulte a su dietista para ver si está bien que la consuma.
Obtenga más información sobre el sodio.
Mito 6: Las personas con enfermedad renal no pueden consumir una dieta a base de plantas
Antes se evitaban los alimentos de origen vegetal porque los nefrólogos consideraban que contenían demasiado potasio y fósforo pero no suficiente proteína. Ahora sabemos que las dietas a base de plantas bien equilibradas confeccionadas por especialistas en nutrición renal pueden prevenir y desacelerar el avance la enfermedad renal crónica, la diabetes tipo 2, la presión arterial alta y la enfermedad cardíaca.2
"Si consume una buena dieta a base de plantas densa en nutrientes y tiene enfermedad renal, es posible que se sienta mucho mejor”, dice la especialista en nutrición renal Jessianna Saville RD, CSR LDN. “Es muy practicable, pero si le genera ansiedad, elabore un plan con su dietista. Es la persona indicada para brindarle orientación.”
Obtenga más información sobre las dietas a base de plantas.
Fuentes
1 “Cheese, Feta, Whole Milk, Crumbled.” FoodData Central, USDA, https://fdc.nal.usda.gov/fdc-app.html#/food-details/2259796/nutrients.&…;
> 2 Cooper, Matthew, et al. “Report of National Kidney Foundation Consensus Conference to Decrease Kidney Discards.” Clinical Transplantation, vol. 33, no. 1, 2018, https://doi.org/10.1111/ctr.13419.